Que tal camaradas, cómo han estado todo este tiempo que me ausenté? Que por cierto disculpenme, he estado ocupado con cuestiones del trabajo y asuntos familiares que ya ni espacio tenia para el blog. Pero estoy de vuelta, y no de la manera como hubiera querido, sino con mucho dolor en el alma y con desaliento de saber que un familiar muy importante para mi está combatiendo nuevamente con un ya crónico enemigo, el pie diabético. Quizas sea esta desolación que me tiene minimizado la que me ha hecho volver a mi blog, el único lugar donde me siento cómodo de expresar mis sentimientos, no como el facebook donde o alguien se toma tus publicaciones personales u otro las toma a broma. En fin, solo quiero saber si han sentido cuando pareciera que las cosas se configuraran para hacer más dificultosa tu vida de lo que ya es, pues bien, a si es como me siento ahora, entrando a una tormenta que se ve venirse con todo su abrumador poder de destrucción. Solo espero tener el valor suficiente para afrontarla, porque no es la primera tormenta, ni la segunda, ni la tercera, es una saga más de esta serie que parece interminable, de la cual no se si me sigue haciendo fuerte, o ya ha comenzado a matarme.
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